El Sistema de Direccionamiento

Continuando la ficha técnica, vamos a encontrar que se especifica el sistema de direccion vehícular permite al conductor controlar la trayectoria mediante el volante, la columna de dirección, la caja de dirección y los componentes de la suspensión.

El sistema de dirección del automóvil fue evolucionando partiendo de una palanca hasta llegar a los volantes y sistemas asistidos electrónicamente de hoy. La función es la misma de siempre: orientar las ruedas hacia donde el conductor quiera. Por su naturaleza tiene varios requisitos que cumplir: tiene que ser seguro, suave y preciso. Hay dos sistemas difundidos aunque el de sinfín esta cayendo en desuso para vehiculos livianos. Con la dirección a sinfín, el giro del volante va a través de la columna de dirección a una caja de dirección que tiene engranajes que desmultiplican el giro. Se usa principalmente en vehiculos pesados y con eje delantero rigido.

La mas difundida es la que llamamos cremallera. En esta el giro del volante se transmite por la columna de dirección hasta el piñon que acciona la cremallera. Le debe su popularidad a su sencillez, facilidad de montaje, poco esfuerzo de parte del conductor y suavidad en el giro. Los dos sistemas pueden usar asistencia para ganar confort, es lo que se dice “dirección asistida”: hidráulica o eléctricamente se genera presión para que la dirección sea mas “blanda” y absorba mejor las irregularidades del terreno.

En la dirección hidráulica hay una bomba, accionada por correa, que genera presión de aceite (ATF o especiales de dirección) Esta presión va a través de tuberías a la cremallera, enviado presión en el sentido que se quiere girar, haciendo que sea blanda. El sistema hidráulico tiene la desventaja de usar fuerza del motor (a través de la correa) restándole potencia. Actualmente, en especial en vehículos de baja cilindrada, se usan bombas eléctricas en vez de hidráulicas. Tienen la ventaja de no necesitar potencia del motor. Otro sistema consiste en la dirección asistida electrónicamente. Aquí ya no hay presión hidráulica sino que es un motor eléctrico el que se encarga de apoyar el movimiento del volante. Es el más versátil de todos, ya que puede adaptarse a las necesidades momentáneas: dirección blanda al estacionar y más dura y precisa a altas velocidades. Incluso hay sistemas que corrigen la dirección en caso de emergencia como cuando el vehículo sale de su carril.